La
participación del tenis español en los Juegos Olímpicos de París de 1924 fue
tan histórica como complicada. Histórica, porque supuso el debut de la mujer en
el panorama deportivo olímpico español con la participación de Lilí Álvarez,
recién cumplidos los 19 años, y Rosa Torras, y complicada por las vicisitudes
económicas que tuvo que afrontar el deporte español, aspecto en el que jugó un
papel destacado de gestión la Real Asociación de Lawn Tennis de España (RALTE).
Líli Álvarez |
El
presupuesto inicial previsto por el COE para la participación española en las
pruebas de lawn-tennis fue de 22.500 pesetas, pero el gasto real (incluyendo la
preparación y la participación de los jugadores) fue de 31.174,65 pesetas. La
preparación y decisión de la formación del equipo español fue compleja. En una
reunión mantenida por la RALTE en el Hotel Majestic de Barcelona, se decidió
que “del 15 de mayo al 25 de junio habrá unas pruebas de selección para los
Juegos y que para el entrenamiento se contratará a un profesor inglés”. También
se decide que el equipo lo formarán cuatro jugadores, dos suplentes y dos
jugadoras”, y se discute acerca de la conveniencia de nombrar a un capitán-no
jugador del equipo.
Finalmente
se contrató como entrenador del equipo al profesor italiano Romeo Acquarone,
que fue mentor de Henri Cochet e instruyó en el juego a S.M. la Reina de España
en el Palacio de Lady Ancaster y a S.A.R el Prícipe de Gales. Los partidos de
entrenamiento se realizaron en el Real Lawn Tennis Club del Turó. El
equiposalió finalmente destino a París desde la Estación de Francia de
Barcelona con el Marqués de San Román de Ayala como capitán. El equipo olímpico
español estaba formado por ocho tenistas: Lilí Álvarez, Rosa Torras, Francisco
Sindreu, Rafael Morales, Eduardo Flaquer, Manuel Alonso, José María Alonso y
Ricardo Saprissa. Aunque fueroninscritas en la competición, e incluso aparecen
en los cuadros, María Luisa Marnet e Isabel Fonrodona no viajaron a la cita
olímpica.
La
RALTE aprobó que el equipo se alojara en un chalet en los alrededores de París,
pero finalmente el equipo se instaló en el Hotel Deux Mondes, situado en el
número 22 Avenida de la Opera, hotel en el que el estadounidense Scott Figerald
escribió el Gran Gatsby.
Manuel
Alonso y Lilí Álvarez firmaron la mejor actuación de la delegación
españolallegando a la ronda de los ocho mejpres. A pesar de encontrarse
enferma, y a la recomendación de los médicos de no presentarse, Lilí Álvarez
saltó a la pista para jugar su partido individual de cuartos de final en
el que fue derrotada por la francesa Germaine Golding, un partido en el que en
condiciones normales el favoritismo era claro para la tenista española. El
partido de cuartos de final masculino entre Manuel Alonso y el estadounidense
Vincent Richards fue considerado como el mejor partido del torneo. La anécdota
surgió cuando el árbitro debió ser cambiado por la organización tras los
constantes abucheos del público ante varios errores clamorosos que perjudicaron
al tenista español.
También queda como
anécdota destacada la presencia en el equipo de Ricardo Saprissa. Aunque sus
padres, José Saprissa y Carmen Aymá nacieron en Barcelona, Ricardo JuanAntonio
Saprissa Aymá nació en San Salvador, El Salvador. Fue uno de los grandes
sportmen de la época, y sin duda uno de los tenistas con más capacidad atlética
de cuantos jugaban en España. Ingeniero de la Escuela Politécnica Militar,
además de un gran tenista (dos veces campeón de España de dobles ycomponente
del equipo español de Copa Davis en 1930), fue defensa y capitán en el equipo
de fútbol del RCD Español de Barcelona, jugó en los equipos de hockey sobre
hierba de la Societat Sportiva Pompeia y del Real Club de Polo. Tras su marcha
a Sudamérica, compitió en tenis por Costa Rica en los Juegos Centroamericanos y
del Caribe de 1938, y fue director técnico de la selección de fútbol del país
en los Juegos Panamericanos de 1961.