viernes, 28 de febrero de 2014

París 1924 :El tenis abandera el deporte femenino español


La participación del tenis español en los Juegos Olímpicos de París de 1924 fue tan histórica como complicada. Histórica, porque supuso el debut de la mujer en el panorama deportivo olímpico español con la participación de Lilí Álvarez, recién cumplidos los 19 años, y Rosa Torras, y complicada por las vicisitudes económicas que tuvo que afrontar el deporte español, aspecto en el que jugó un papel destacado de gestión la Real Asociación de Lawn Tennis de España (RALTE).
Líli Álvarez
José Vidal Ribas Güell, presidente de la RALTE, era además el Tesorero del Comité Olímpico Español. Fue el promotor del documento ‘Manifiesto al País’, documento destinado a sensibilizar a la población para recaudar fondos destinados a la participación de los deportistas españoles en los Juegos de París. El documento fue enviado desde la sede del Comité Olímpico Español (COE) en el número 220 de la calle Valencia de Barcelona. El documento está datado como Madrid-Barcelona, Marzo de 1924, y firmado por miembros del COE y las delegaciones del COE en Madrid y París. José Vidal Ribas Güell emitió cartas personalizadas a los clubes de tenis españoles, que enviaron los fondos recaudados al Tesorero de la RALTE con sede en el número 1 de la calle Pelayo de Barcelona. La iniciativa logró una recaudación de 18.958,80 pesetas. Las cifras aportadas por el tenis ascendieron a 3.360,75 pesetas. Los benefactores fueron el Real Barcelona LTC (1.255 ptas), el RC Puerta de Hierro (500), el San Sebastián Recreation Club (345), Alfredo Faulcombridge y el Valencia LTC (250), la RST de Santander (195), la SD Pompeya (192), la RSD Asturiana de Oviedo (123,75), la SS Atlética Stadium de Zaragoza (75), el Español LTC de Madrid (75), la Sociedad Hípica de Ceuta (50), el Barón de Satrústegui (25) y el Club Zafra de Huelva (25).
El presupuesto inicial previsto por el COE para la participación española en las pruebas de lawn-tennis fue de 22.500 pesetas, pero el gasto real (incluyendo la preparación y la participación de los jugadores) fue de 31.174,65 pesetas. La preparación y decisión de la formación del equipo español fue compleja. En una reunión mantenida por la RALTE en el Hotel Majestic de Barcelona, se decidió que “del 15 de mayo al 25 de junio habrá unas pruebas de selección para los Juegos y que para el entrenamiento se contratará a un profesor inglés”. También se decide que el equipo lo formarán cuatro jugadores, dos suplentes y dos jugadoras”, y se discute acerca de la conveniencia de nombrar a un capitán-no jugador del equipo.
Finalmente se contrató como entrenador del equipo al profesor italiano Romeo Acquarone, que fue mentor de Henri Cochet e instruyó en el juego a S.M. la Reina de España en el Palacio de Lady Ancaster y a S.A.R el Prícipe de Gales. Los partidos de entrenamiento se realizaron en el Real Lawn Tennis Club del Turó. El equiposalió finalmente destino a París desde la Estación  de Francia de Barcelona con el Marqués de San Román de Ayala como capitán. El equipo olímpico español estaba formado por ocho tenistas: Lilí Álvarez, Rosa Torras, Francisco Sindreu, Rafael Morales, Eduardo Flaquer, Manuel Alonso, José María Alonso y Ricardo Saprissa. Aunque fueroninscritas en la competición, e incluso aparecen en los cuadros, María Luisa Marnet e Isabel Fonrodona no viajaron a la cita olímpica.
La RALTE aprobó que el equipo se alojara en un chalet en los alrededores de París, pero finalmente el equipo se instaló en el Hotel Deux Mondes, situado en el número 22 Avenida de la Opera, hotel en el que el estadounidense Scott Figerald escribió el Gran Gatsby.
Vitrina de Paris 1924 de la exposición "El Tenis y los Juegos Olímpicos"

 La competición parisina se desarrolló en nueve pistas de tierra batida instaladas en el Stade Olympique Yves-du-Manoir en Colombes. La competición estuvo marcada por el fuerte calor. No hubo ninguna jornada con lluvia, pero mucho viento en semifinales que levantó grandes polvaredas y molestó mucho a los tenistas yespectadores. Un total de 26.970 espectadores de pago y 9.138 invitados fue el balance de asistencia a la competición. A las finales, que contaron con la presencia de la Reina de España, Doña Victoria, asistieron un total de 9.184 espectadores.
Manuel Alonso y Lilí Álvarez firmaron la mejor actuación de la delegación españolallegando a la ronda de los ocho mejpres. A pesar de encontrarse enferma, y a la recomendación de los médicos de no presentarse, Lilí Álvarez saltó  a la pista para jugar su partido individual de cuartos de final en el que fue derrotada por la francesa Germaine Golding, un partido en el que en condiciones normales el favoritismo era claro para la tenista española. El partido de cuartos de final masculino entre Manuel Alonso y el estadounidense Vincent Richards fue considerado como el mejor partido del torneo. La anécdota surgió cuando el árbitro debió ser cambiado por la organización tras los constantes abucheos del público ante varios errores clamorosos que perjudicaron al tenista español.
También queda como anécdota destacada la presencia en el equipo de Ricardo Saprissa. Aunque sus padres, José Saprissa y Carmen Aymá nacieron en Barcelona, Ricardo JuanAntonio Saprissa Aymá nació en San Salvador, El Salvador. Fue uno de los grandes sportmen de la época, y sin duda uno de los tenistas con más capacidad atlética de cuantos jugaban en España. Ingeniero de la Escuela Politécnica Militar, además de un gran tenista (dos veces campeón de España de dobles ycomponente del equipo español de Copa Davis en 1930), fue defensa y capitán en el equipo de fútbol del RCD Español de Barcelona, jugó en los equipos de hockey sobre hierba de la Societat Sportiva Pompeia y del Real Club de Polo. Tras su marcha a Sudamérica, compitió en tenis por Costa Rica en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1938, y fue director técnico de la selección de fútbol del país en los Juegos Panamericanos de 1961.





jueves, 20 de febrero de 2014

El debut olímpico del tenis español: AMBERES 1920


Tenistas de 15 países, entre ellos España, disputaron la competición de tenis de los Juegos Olímpicos de Amberes celebrada en Amberes del 16 al 24 de agosto de 1920. Para los nuestros fue una participación histórica, la primera oficial de un equipo de España en una competición internacional de tenis, ya que hasta 1921 no se produjo el debut del equipo español en la Copa Davis.

La competición se disputó en unas pistas construidas en los alrededores del Beerschot Stadium, sede de las pruebas de atletismo. En ellas se jugaron las cinco pruebas: individual masculino, individual femenino, doble masculino, doble femenino y doble mixto, en las que se inscribieron un total de 75 tenistas: 52 hombres y 23 mujeres. No hubo jugadores estadounidenses ya que el torneo olímpico coincidía con la disputa de los US Open Championships en Forest Hills.

Aunque en los textos oficiales aparece que el torneo se disputó sobre hierba, una detalla crónica de las pistas explica que estás se hicieron con el polvo de ladrillos triturados, algo que en nuestros días definiríamos como tierra batida. De ahí que el color fuera gris oscuro y no rojizo.

España acudió a Amberes con cuatro jugadores: Manuel Alonso, José María Alonso, José Miguel Fernández de Liencres y Enrique de Satrústegui. Desfilaron en la ceremonia inaugural en la que el cartel de España lo portaba el futbolista Mariano Arrate mientras que la bandera era paseada por el atleta, lanzador de peso y jabalina, Ignacio Izaguirre. Formaron junto a los nadadores y justo por detrás de los futbolistas españoles.

Aunque en las crónicas oficiales, e incluso en los cuadros, figura Eduardo Flaquer como competidor, éste finalmente no viajó a Amberes como él mismo reconoce en sus cuadernos de apuntes. Su plaza la ocupó José Miguel Fernández de Liencres. Inscritas oficialmente, tampoco viajaron María ‘Lilly’ Rozpide y Francisca Subirana, aunque sus nombres aparecen en los cuadros de resultados, en el caso de Subirana como jugadora italiana y de nombre Francesca. Días antes del viaje, un delegado del Comité Olímpico de Cataluña había viajado incluso a San Salvador para recoger la firma oficial de la inscripción de Francisca Subirana, vecina y amiga de Pau Casals.

La renuncia de Eduardo Flaquer, Francisca Subirana y María ‘Lilly’ Rozpide se debió a cuestiones particulares, aunque dimisiones y tensiones en el seno de la Asociación de Lawn Tennis de Catalunya, así como opiniones divergentes en la composición de las parejas de dobles, quizás tuvo su influencia en la decisión, hecho no demostrado pero apuntado en algunos círculos periodísticos de la época. Tampoco estuvo Manolo Gomar, Conde de Gomar, junto a Manuel Alonso el mejor tenista español de la época, pero en su caso por cuestiones de salud.

Cuartofinalista en el torneo individual, en lo que fue la mejor actuación del equipo español, Manuel Alonso fue ampliamente alabado por la prensa olímpica. En una de las crónicas de la época se destaca: “Manuel Alonso desde un principio ha sabido mantener dignísimamente el espíritu de franca hidalguía y caballerosidad que ha sido siempre gala de los españoles. En su partido ante el campeón ingles Beamish, ni una protesta formuló, conformándose con todos los fallos del árbitro, siempre perjudiciales, y aceptó cuando lo propuso el contrario, que algo nervioso no cesaba de protestar durante todo el encuentro. Devolvió tantos, anuló los que al contrario le parecieron dudosos, dio por buenos los que quisieron, y así, dignamente, caballero, también venció y ganó el partido”

El partido de segunda ronda entre el británico Gordon Lowe y el griego Anthanasios Zerlendis es el que más juegos ha desgranado en la historia del tenis olímpico (72). Venció Lowe por 14-12, 6-8, 5-7, 6-4 y 6-4. El partido duró cerca de seis horas y se disputó en dos días. La anécdota en el primer día fue que los recogepelotas, hartos y hambrientos de tanto peloteo, se marcharon a comer y el partido debió ser suspendido por ese motivo. También fue un problema la proximidad de las pistas con el estadio de atletismo, que provocó que en numerosas ocasiones la interrupción de partidos por el griterío.

Tras la victoria de Charles Winslow en los Juegos de Estocolmo de 1912, el zurdo Louis Raymond mantuvo la hegemonía olímpica del tenis sudafricano en la prueba individual al derrotar en la final al japonés Ichiva Kumagae y ganar la medalla de oro. La plata de Kumagae fue la primera medalla lograda por un japonés en la historia de los Juegos Olímpicos. Winslow ratificó el dominio del tenis masculino sudafricano en la prueba ganando la medalla de bronce.

La francesa Suzanne Lenglen, ‘La Divina’, se llevó la medalla de oro individual cediendo sólo cuatro games en la competición, tres de ellos en la final ante la británica Edith Holman, uno en semifinales y despachar sus primeros cuatro partidos con sendos 60 60. Kathleen ‘Kitty’ Godfree, la mujer que privó en 1926 a Líli Álvarez del título en Wimbledon, se llevó la medalla de bronce.
  
RESULTADOS ESPAÑOLES

INDIVIDUAL MASCULINO

PRIMERA RONDA
Enrique de Satrústegui bye
José Miguel Fernández Liencres a Albert Linqvist (Sue) 0-6 6-2 6-3 6-2
Manuel Alonso a Jaroslav Just (Che) 6-3 2-6 6-0 6-2
Ichiya Kumagay (Jap) a José María Alonso 7-5 6-3 6-2
SEGUNDA RONDA
Charles Simon (Sui) a Enrique de Satrústegui 3-6 8-6 6-2 6-8 6-2
Mino Balbi di Robecco (Ita) a José Miguel Fernández Liencres 6-2 6-4 6-1
Manuel Alonso a Maxwell Woosnam (GB) 6-1 2-6 6-1 6-3
TERCERA RONDA
Manuel Alonso a Alfred Beamish (GB) 6-1 5-7 5-7 6-3 6-1
CUARTOS DE FINAL
Noel Turnbull (GB) a Manuel Alonso 0-6 7-5 4-6 6-3 7-5

INDIVIDUAL FEMENINO

PRIMERA RONDA
Winifred McNair (GB) a Francisca Subirana w/o

DOBLES MASCULINO
PRIMERA RONDA
Brian Norton / Louis Raymond (RSA) a Manuel Alonso / José María Alonso 6-3 7-5 6-0
José Miguel Fernández Liencres / Enrique de Satrústegui a Victor de Laveleye / Stephan Halot (Bel) 7-5 6-3 1-6 6-4

SEGUNDA RONDA
Pierre Albarran / Max Decugis (Fra) a José Miguel Fernández Liencres / Enrique de Satrústegui 6-2 3-6 6-3 6-4

DOBLES MIXTOS
PRIMERA RONDA
Albert Lammens / J. Chaudoir (Bel) a Manuel Alonso / Francisca Subirana w/o
Maxime Decugis / Suzanne Lenglen (Fra) a José María Alonso / María ‘Lily’ Rozpide w/o

viernes, 7 de febrero de 2014

Citius, Altius, Tennis: Los orígenes del tenis olímpico


En 1894 el lawn-tennis había dejado ya su etiqueta de juego de recreo. Diecisiete años antes, en 1877, se había puesto en marcha el primer torneo en las pistas del Church Road del All England Lawn Tennis and Croquect Club de Wimbledon. En 1881, el Casino de Newport en Rhode Island había celebrado la primera edición del Open de los Estados Unidos y en 1891, en las parisinas pistas de la Île de Puteaux, los miembros de su club de lawn-tennis se habían unidos a los de la sociedad atlética de la Villa Primrose de Burdeos, a los del Tennis Club de Paris de la Porte d’Auteil y a los del Racing Club de Paris para crear los Campeonatos de Francia, embrión del actual torneo de Roland Garros.

Sin embargo, en 1894 el tenis era un deporte prácticamente desconocido en Grecia. Se ha contastado la existencia de algún jardín en finca privada en el que se jugaba al deporte de la raqueta, pero no había un solo club en la ciudad. En diciembre de 1894, el propio Dimitris Vikelas, primer presidente del Comité Olímpico Internacional, en sus consideraciones para organizar en la capital griega los primeros Juegos de la era moderna, declaró que deportes como el boxeo, waterpolo, fútbol, cricket, golf, hockey, jeu de paume, tiro con arco, patinaje sobre hielo, alpinismo y las carreras de caballos deberían ser excluidos del programa oficial por que no habrían atletas inscritos. Vikelas utilizó incluso el nombre de jeu de paume para referirse al ya conocido deporte del lawn-tennis. 

Los motivos de la inclusión del tenis como deporte en los Juegos de Atenas 1896 hay que buscarlos en base a la influencia atlética británica, y posiblemente a que el Barón de Coubertin, educado en el sistema atlético anglosajón, era socio y practicante de lawn-tennis en el Puteaux Club parisino. También influyó que durante el período de sesiones del Congreso del CIO en París en las que se debatía el programa olímpico, sus delegados pudieron ver a este deporte en acción en los Jardines de Luxemburgo, en unos canpeonatos de Francia ganados por el equipo de Valenciennes.

El primer paso para los organizadores de la cita olímpica de Atenas fue auspiciar la creación de un club en la ciudad. Así, en 1895, nació el Atenas Lawn Tennis Club. La conexión de esta entidad con los futuros juegos fue total. Tres de los principales responsables de Atenas 1896, Thrassiboulos Manos, Alexandros Merkatis y Constantinos Manos, fueron socios fundadores y el propio general Thrassiboulos Manos, elegido presidente de la entidad. Constatinos, hijo de Thrassiboulos, había estudiado en Oxford, jugado al lawn –tennis y viajado por Europa.

El Atenas Lawn Tennis Club asumió la responsabilidad de proponer y controlar lo que sería la competición olímpica y Alexando Merkatis, el responsable de la construcción del club. En septiembre de 1985, a propuesta de Merkatis, se decidió que la mejor ubicación para el club ateniense sería en los alrededores del Templo de Zeus. La idea se aceptó y se alquilaron los terrenos por un periodo de cinco años para ubicar un proyecto de 3 pistas y un chalet social. Pero el propio Merkatis consideró que para la competición olímpica sería más apropiado utilizar el interior del Velódromo construido en New Phalero por el ingeniero Bellini, instalación que tenía como referencia el velódromo de Copenhague con capacidad para 7.000 espectadores. La propuesta fue aprobada por el Comité Ciclista y Atlético de los Juegos, al mismo tiempo qe el Atenas Lawn Tenis Club pasó a ser apadrinado por el Príncipe Constantino y sus hermanos George y Nicolaos.
 
A las 16.30 horas del 8 de abril de 1896, tras la disputa de la prueba ciclista de 100 kilómetros, se inició la competición de lawn-tennis de los Juegos de Atenas. Aún en nuestros días hay discusión de si toda la competición se disputó en esa instalación, o si alguno de los encuentros se trasladó a las pistas del Atenas Lawn Tennis Club debido a problemas de organización.